Qué tipos de hornos hay
En prácticamente todas las cocinas de cualquier vivienda hay un horno. Se podría decir que, entre los electrodomésticos que suelen habitar una cocina, los hornos son de los más antiguos, aunque, como es obvio, los hornos actuales no tienen mucho que ver con los que tenían nuestros abuelos hace décadas.
Aunque nuestros hábitos hayan cambiado mucho y ya no se suelan utilizar tan intensamente como hace años, los hornos siguen siendo una parte fundamental en las cocinas y, si faltan, se les suele echar de menos. Muchas veces, cuando se llega a una cocina, el horno ya suele estar allí, esperando a ser utilizado y aprovechado o, en el caso menos deseable, olvidado. Pero hay muchas veces en las que, por sustitución, o porque llegamos a una vivienda nueva en la que no hay horno, tenemos que afrontar la compra de uno nuevo.
Existen muchos modelos de horno en el mercado
Ésta no es una tarea sencilla, aunque a priori lo pueda parecer. Son muchos los modelos de horno que hay en el mercado, de distintas marcas y con distintas características, lo que hace que la búsqueda de horno pueda parecer un poco laberíntica al principio. Antes de afrontar esta pequeña aventura, es recomendable que aclaremos qué tipo de horno necesitamos, según el uso que le vayamos a dar y el presupuesto que tengamos disponible. Una vez dado ese primer paso, habremos avanzado mucho en el proceso de búsqueda y compra de un horno nuevo.
Tipos de hornos según su fuente de energía
A la hora de clasificar los distintos tipos de horno que hay, se pueden diferenciar primero por la fuente de energía que utilizan para conseguir el calor que producen. En los hornos domésticos, son dos las principales:
Hornos Eléctricos
Este tipo de hornos es el que consigue aumentar su temperatura interior gracias a unas resistencias eléctricas que, dependiendo del modelo, pueden estar en la parte inferior, superior o trasera del horno. La regulación de la temperatura se consigue mediante un termostato, lo cual resulta bastante preciso a la hora de controlar la cocción, y suelen ser hornos bastante fiables y resistentes. Estos modelos de hornos eléctricos pueden ser bastante económicos, aunque su consumo sí resulta más elevado. Son los hornos más populares y que más se han desarrollado en las últimas décadas, y dentro de los hornos eléctricos hay muchas clases distintas según su funcionamiento.
Hornos de Gas
Los hornos de gas resultan muy eficientes, ya que se consiguen temperaturas más altas en menos tiempo y, también, su consumo resulta mucho más económico que el de los eléctricos, por los precios actuales de la luz y del gas. Estos hornos eran más populares hace años y, aunque aún se siguen vendiendo e instalando, actualmente han ido dejando paso a los hornos eléctricos, cuya evolución y seguridad en el funcionamiento ha crecido exponencialmente.
Tipos de hornos según su funcionamiento
Los hornos eléctricos han evolucionado mucho durante las últimas décadas y, también, se han vuelto más asequibles para el usuario medio, que cada vez demanda mejores características y más modernas. Según la manera en la que consigan calentar su interior, se pueden distinguir distintos tipos de hornos eléctricos, todos ellos habituales en las cocinas domésticas hoy en día, en mayor o en menor medida.
Hornos Convencionales
Son los hornos más simples y, también, los más tradicionales y habituales. Estos hornos eléctricos calientan su interior a través de unas resistencias que suelen estar ubicadas en la parte inferior, aunque algunos también incorporan unas superiores para gratinar o dorar la parte superior de los alimentos que se están cocinando. Suelen ser los hornos más económicos a la hora de adquirir uno, pero también tardan más en calentarse, por lo que el consumo se puede disparar.
Hornos de Convección
Estos hornos calientan su interior con aire previamente calentado por unas resistencias e impulsado a través del interior del horno por medio de unos ventiladores. Esto hace que el aire circule por todo el interior del horno de manera más homogénea que en los hornos convencionales, lo cual consigue unos resultados más satisfactorios a la hora de cocinar y, también, un uso más eficiente de la energía consumida. Este tipo de hornos de convección se está convirtiendo en una opción muy popular, ya que la relación calidad precio que ofrecen es muy equilibrada y su mantenimiento y reparaciones no es especialmente complicado, más allá de las medidas y precauciones básicas.
Hornos Microondas
Los hornos microondas son los que combinan el horno y el microondas en un mismo electrodoméstico. Entre las ventajas de esto, claramente, está que se ahorra espacio al tener dos electrodomésticos en uno, con lo que con el mismo aparato podemos calentar rápidamente o descongelar y, también, hornear en caso de necesitarlo. Lo malo es que no se pueden hacer las dos cosas a la vez y, también, que el espacio que suele haber en su interior es reducido en comparación al de un horno convencional o de convección, más similar al tamaño de un microondas. A su vez, también resultan algo más caros y sus reparaciones suelen ser más delicadas y costosas. Eso sí, no dejan de ser una opción muy adecuada en esas cocinas en las que el espacio escasea.
Éstos son los tipos principales de hornos que se pueden encontrar en el mercado actualmente. También los hay de tipo más profesional, como los hornos de vapor, que resultan más indicados para los que busquen un tipo de cocina específica y avanzada, o los hornos pirolíticos, muy recomendados para los que utilicen el horno muy a menudo ya que, gracias a esta función, el horno puede llegar a alcanzar unos 500 grados centígrados, con lo cual carboniza cualquier resto que pueda quedar en su interior para facilitar mucho las tareas de limpieza.
Con estas pequeñas explicaciones seguro que tenemos más claro los tipos de horno que se suelen vender y, también, cuáles son los que mejor se pueden amoldar a nuestras necesidades. Una vez decidido el tipo de horno, ya sólo queda decantarse por las marcas y modelos en concreto, algo que también hay que estudiar detenidamente, no sólo por sus características, sino también por las garantías y servicios postventa que puedan ofrecer los fabricantes.
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